Sello de Calidad a Inmobiliarias: ¿Qué es y qué mide?
Medir la experiencia de compra de los clientes cuando adquieren su casa o departamento es un proceso valorado por los nuevos propietarios; y para las inmobiliarias, una oportunidad de medir y mejorar sus estándares.
Medir la experiencia de cliente se ha vuelto clave para todas las industrias y la inmobiliaria no ha quedado al margen. Una de las certificaciones más conocidas es “Best Place to Live”, un sello de calidad que certifica a aquellas que entregan un buen servicio y experiencia, según la opinión de sus propios clientes.
“Para la empresa es un reconocimiento a todo el trabajo de servicio y desarrollo de producto que hay detrás de la construcción de una vivienda, sea casa o departamento, porque el compromiso que tenemos con nuestros clientes es entregar los mejores estándares de calidad en cada proyecto”, explica María de la Luz Valdés, gerenta comercial de BRICSA, inmobiliaria que cuenta con este sello de calidad en sus proyectos.
“Best Place to Live” ha cobrado importancia porque mide variables relevantes para los clientes, como son la gestión de ventas, pre entrega y entrega final de la propiedad, el servicio de posventa y otros aspectos generales como el equipamiento, los elementos constructivos y las áreas comunes de los proyectos. Entendiendo que la compra de un bien raíz es una decisión razonada y que requiere una inversión importante, la certificación tiene como objetivo que los futuros propietarios tomen una decisión responsable e informada a la hora de adquirir una vivienda, sea casa o departamento.
Bajo esa misma lógica, BRICSA se suscribió a esta medición voluntariamente en sus proyectos de edificios y casas que actualmente tiene en venta, con muy buenos resultados de satisfacción general.
Fuente: Quórum Comunicaciones